Publicaciones - Lugares que amar

Presentaciones del libro:


  • Edifici de la República. Sala polivalent.

    Carrer d'Arcadi Balaguer, 25, 08860 Castelldefels, Barcelona
    23 de abril de 2022
    • Con: Lucía León y la Autora

Presentación "Lugares que amar". Notas de la Autora.

El libro se compone de dos partes que se convierten tanto en la primera como en la segunda parte en un largo homenaje.
Respecto a la primera parte, en el homenaje al séptimo arte, he elegido películas consideradas ya en su mayoría clásicas y que responden a parte de mis preferencias fílmicas, y me he preguntado: qué tienen en común, por ejemplo, las recreaciones poéticas de las seis películas que aparecen. Pues creo que la mayoría contienen esa pulsión universal de la lucha por la vida, tratando de jugar a evadir la muerte y a poner de manifiesto las injusticias que los seres humanos han de sortear en esa lucha, a saber, la miseria material de los menos privilegiados, desde fechas como la Edad Media y también la miseria espiritual de los más poderosos en poemas dedicados a las películas "El séptimo sello" de Bergman o "Andrei Rubley" de Tarkovsky. El menosprecio por los derechos individuales de la mujer en "La tercera esposa" y su lucha ya desde el siglo XIX por desprenderse del sesgo machista, de ese esposo patriarcal que toma a sus esposas como a un elemento decorativo, como parte del sacrificio de sus Ceremonias ancestrales. O la mujer en la persona de una Medea mitológica, pero que tristemente representa a una de las tragedias de nuestros días más en la figura del hombre. Una Medea que, arrebatada por el instinto y la pasión, despechada, es capaz de asesinar a sus propios hijos. Las ideas del Romanticismo, como la rebelión del ser humano ante su dios o ante la muerte en el personaje de un replicante, un robot a imagen humana, en el poema dedicado a la película Blade Runner, o esa misma rebelión en la persona del Ángel cuya misión y sacralidad sobre el mundo humano reconoce inútil, renunciando al Cielo y a su situación en las alturas, en el poema dedicado a "Cielo sobre Berlín"
Mi homenaje al teatro a través de esos dos universales personajes que son Hamlet de William Shakespeare y Yerma de Federico García Lora. Y qué tienen ambos en común, me he preguntado, pues son dos personajes que inscritos ambos en un estatus sociopolítico, en el caso de Hamlet su posición de Príncipe de la corte danesa o socioinstitucional, en el caso de Yerma desde ese matrimonio que le ha sido impuesto, luchan por lo que ellos consideran una injusticia, el asesinato del padre y rey en el caso de Hamlet y la negación del hijo, en el caso de Yerma, pero sin querer salirse o transgredir ese mismo contexto, ese mismo círculo que acabará con ellos, de forma que su propia demora en deshacer el nudo de acontecimientos que se van sucediendo, provocará la tragedia final.
El homenaje se extiende también a dos cuadros significativos en el mundo del arte, uno del Pre-Renacimiento, La muerte de Procris, de Piero di Cosimo y otro del Romanticismo, El caminante sobre un mar de nubes de Caspar David Friedrich. Así como a parte de la obra escultórica de Chillida y de Maïs. Homenaje también a la palabra poética y a la fotografía
representada en Sebastião Salgado o en Enric Velo.
En la segunda parte sigue el homenaje que rindo en esta ocasión a la Naturaleza y a las criaturas que la habitan. A la magia de los desiertos, como un espacio en donde lo inerte (lo que parece muerto) cobra vida estética por su indescriptible belleza. Homenaje al misterio del mar y a sus espacios abisales. O a esos paisajes, en donde ante la amenaza de calentamiento global, aún nieva, aún podemos, no sabemos por cuanto tiempo, deleitarnos con esa gran belleza y también con la dura existencia y el permanente exilio en que viven sus criaturas, y ese exilio tan actual que amenaza también al ser humano. Homenaje a las mujeres violadas en general y en particular a las de la Guerra de Bosnia. Una de las consecuencias atroces de las guerras aun situándonos en los siglos XX y XXI.
El homenaje llega también a esos seres humanos que luchan, que resisten ante su propia vulnerabilidad y los peligros del mundo, con la misión que se han impuesto, héroes silenciosos, lugares heridos, como el fotorreportero de guerra, el drogadicto o la mujer a quien un volcán le ha arrebatado todo, personajes a quienes yo en mi humilde intento poético, trato de visibilizar. Homenaje a las víctimas de esta Pandemia que nos ha tocado vivir, poemas escritos en el tiempo del confinamiento, con un sentido de deseo de superación de los malos tiempos, de esperanza y de agradecimiento.
En esta segunda parte hay un intento de mostrar la belleza de nuestro planeta, de inducir a amarlo, pues de momento, no tenemos otro lugar más habitable que este.
En mi libro, sobre todo en la segunda parte, también existe esa relación entre el Universo o macrocosmos y el microcosmos, entre la Naturaleza y el ser humano y otras criaturas que la habitan.
Para resumir y concluir y tal como figura en la contraportada del libro "Lugares que amar" es un homenaje al séptimo arte, al arte de un cuadro, de una obra de teatro, de una escultura, de una fotografía o de la propia poesía, a través de la palabra que traduce e interpreta la visión de las imágenes. Homenaje a la naturaleza y a la ejemplaridad y vulnerabilidad de algunas de sus criaturas. Evocación pictórica, palabras como pinceladas, de los espacios y sus gentes amadas, de los lugares, a veces heridos, en que se posa la belleza".